FE Y ESPERANZA HACIA EL CAMINO MÁS EXCELENTE

Ahora, déjenme mostrarles un camino más excelente.
— 1 Corintios 12:31 NVI

Esta epístola fue escrita desde Éfeso un año después de haberse establecido la iglesia en Corinto, ciudad cosmopolita en una época cuando las restricciones morales eran mínimas. Naturalmente, era muy difícil establecer una iglesia y mantenerla pura en esas circunstancias, así que hay un doble propósito de Pablo al escribir esta carta: guiar a la iglesia a separarse del error y del desorden moral, y contestar algunas preguntas específicas que le dirigieron a él.

A pesar de que esta iglesia parecía tener todos los dones, y de que sabían mucho, había influencias en la iglesia del espíritu de inmoralidad y de codicia reinante, de orgullo, de partidismo (unos estaban “con Pablo” y otros “con Apolos”), había contiendas, los líderes se interesaban por el dinero más que el servicio, criticaban a Pablo (decían que él no era apóstol), entre otras cosas; por lo que él les recuerda de que se habían olvidado de algo: de un camino más excelente.

El término "excelente" es un vocablo griego que se refiere a “lo que está más allá”. El término "camino" es una figura para el estilo de vida de Dios. Ahora, la fe del Antiguo y del Nuevo Testamento no era simplemente una creencia correcta, sino una vida de obediencia. De hecho, la Iglesiaprimitiva se identificaba como "El Camino".

Otra versión dice en 1 Cor. 12:31: “Pero ahora déjenme mostrarles una manera de vida que supera a todas las demás.” Este camino, es el camino del amor, el cual describe a lo largo del capítulo 13, en donde concluye diciendo: “Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor. Pero el más importante de todos es el amor.”

  • Fe: la Biblia habla de que tener fe es estar seguro de lo que se espera; es estar convencido de lo que no se ve (Hebreos 11:1).

  • Esperanza: es una garantía de confianza de que las promesas de Dios será una realidad en su momento. Recibimos esa esperanza cuando fuimos salvos. Si uno ya tiene algo, no necesita esperarlo; pero si deseamos algo que todavía no tenemos, debemos esperar con paciencia y confianza (Romanos 8:25).

  • Amor: Llegará un momento cuando la fe ya no haga falta, porque se habrán cumplido todas las promesas de Dios y todo lo que está profetizado en la Biblia. En ese momento también, la esperanza ya no hará falta porque todo lo que esperamos ya será una realidad. En cambio, el amor seguirá siendo porque es propio del carácter de Dios.

Lo que nos atañe principalmente a cada uno de los creyentes tiene que ver con la fe y la esperanza. Nos anima saber que el apóstol Pablo inspirado por el Espíritu Santo nos dice que la esperanza permanece, junto con la fe y el amor. También anima que la fe es una esperanza segura, definida y afirmada por la convicción. Que el Dios de los cielos halle siempre ese poderoso elemento en nosotros, mientras su presencia nos garantiza el amor.