KOINONÍA FIEL

Ámense unos a otros con un afecto genuino y deléitense al honrarse mutuamente.
— Romanos 12:10 NTV

El “caldo de cultivo” de todo servicio o ministerio en la Iglesia es la comunión de los creyentes, o koinonía.  También lo es las actividades en las que Dios se encuentra interesado en manifestarse a su pueblo, allí es donde se dan las interacciones que producen el crecimiento o maduración individual.  Todo desarrollo ministerial sólo se verificará dentro del “cuerpo de Cristo”, la Iglesia. 

DIEZ PILARES DE LA KOINONÍA FIEL

Tienen que ver con la dinámica del habitar y servir juntos en armonía.  Esta clase de convivencia espiritual se expresa en el Salmo 133: “¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía!”

  1. Empezamos por el amor.  Se nos llama a demostrar el amor honrándonos y prefiriéndonosAmaos los unos a los otros con amor fraternal; en cuanto a honra, prefiriéndoos los unos a los otros. Romanos 12:10

  2. Estar dispuestos a servirnos de maneras variadas y significativasY, dado que yo, su Señor y Maestro, les he lavado los pies, ustedes deben lavarse los pies unos a otros. Juan 13:14 NTV

  3. Madurar el sentido de pertenencia a un cuerpo, ligado por Dios, e interdependiente.  “Así como nuestro cuerpo tiene muchas partes y cada parte tiene una función específica, el cuerpo de Cristo también. Nosotros somos las diversas partes de un solo cuerpo y nos pertenecemos unos a otros.” Romanos 12:4-5 NTV

  4. Comprometerse a eliminar murmuración o juicio por las acciones de nuestros hermanos y revisar nuestras actitudes que pudieran perturbarlos y hacerlos cometer errores graves.  “Por tanto, no sigamos juzgándonos unos a otros. Más bien, propongámonos no poner tropiezo al hermano, ni hacerlo caer.” Romanos 14:13 RVC

  5. Eliminar presuposiciones, prejuicios o hasta discriminaciones hacia mis hermanos bloqueando posibilidades de hacer amistad. “Por eso, es necesario que se acepten unos a otros tal y como son, así como Cristo los aceptó a ustedes. Así, todos alabarán a Dios.”  Romanos 15:7 TLA

  6. Superar complejos que impiden las expresiones de cariño directas, físicas y personalesSalúdense unos a otros con un beso santo. Todas las iglesias de Cristo les mandan saludos.”  Romanos 16:16 NVI

  7. Consejo, amonestación no faltarán de manera constante en nuestras relaciones.   “Pero estoy seguro de vosotros, hermanos míos, de que vosotros mismos estáis llenos de bondad, llenos de todo conocimiento, de tal manera que podéis amonestaros los unos a los otros.” Romanos 15:14

  8. Brindemos servicios a los hermanos por amor y con la libertad que tenemos en Cristo.   “Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros.” Gálatas 5:13

  9. Cultivar una actitud de gracia y misericordia con los hermanos de trato difícil.  Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuisteis llamados, con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor…”  Efesios 4:1-2

  10. Evitar el trato hipócrita o manipulador con los hermanos, que van en contra de la verdad y el amor fraternal.    “…ni se mientan unos a otros, porque ustedes ya han dejado la vida de pecado y ahora viven de manera diferente.  En realidad, ustedes son personas nuevas, que cada vez se parecen más a Dios, su creador, y cada vez lo conocen mejor.” Colosenses 3:9-10 TLA

Rev. Jorge Echazábal